¡Tendremos que levantarnos y echar a andar, ¿verdad?! - “Aún falta lo mejor”, advertía el cantante Al Jolson. Con millones de desaparecidos sociales, el planeta puede tornarse el 1984 de George Orwell (sumiso al Gran Hermano), o un sitio donde construir sueños.... Leer mas:
Mikel-Tar
JEAN ZIEGLER, Vicepresidente de Derechos Humanos de la ONU:
“ESPAÑA
NO DEBE PAGAR LA DEUDA”
propone "ocupar y nacionalizar la banca"
“Hay que darse
cuenta de que en el orden mundial reina una violencia estructural que se debe
combatir con una contraviolencia basada en la resistencia pacífica”.
“Vivimos en un orden mundial
criminal y caníbal, donde las pequeñas oligarquías del capital financiero
deciden de forma legal quién va a morir de hambre y quién no. Por
tanto, estos especuladores
financieros deben ser
juzgados y condenados, reeditando una especie de Tribunal de Núremberg”.
“esta situación creará la conciencia
social necesaria para “multiplicar rápidamente las fisuras en el muro
capitalista, que acabarán derrumbándolo y creando un nuevo orden mundial”.
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Entrevista a Jean
Ziegler, ex Relator Especial para el Derecho a la ...
ytumas.wordpress.com
Jean Ziegler,
vicepresidente del consejo consultivo de la Comisión de DDHH
de la ONU.
“Vivimos en un orden mundial
criminal y caníbal, donde las pequeñas oligarquías del capital financiero
deciden de forma legal quién va a morir de hambre y quién no. Por
tanto, estos especuladores
financieros deben ser
juzgados y condenados, reeditando una especie de Tribunal de Núremberg”. Con esta aplastante contundencia despacha Jean
Ziegler, vicepresidente del Consejo consultivo de Derechos Humanos
de la ONU, su particular análisis del actual momento histórico.
La dilatada trayectoria diplomática de
este profesor emérito en la Universidad de Ginebra y
comprometido analista internacional, que fue relator especial de la
ONU para el Derecho a la Alimentación durante ocho años, impide que
le tiemble la voz a la hora de señalar con el dedo inquisidor a los ‘culpables’
de la crisis sistémica. “No puede ser que en un
planeta con los recursos agroalimentarios suficientes para alimentar al doble
de la población mundial actual, haya casi una quinta parte de sus habitantes
sufriendo infraalimentación”.
En su último libro “Destrucción
Masiva. Geopolítica del hambre” (Península), que Ziegler presentó ayer
en Madrid, pone sobre la mesa una serie
de cuestiones molestas de las que otros diplomáticos ni siquiera se atreven a
hablar en los pasillos de la ONU. Unas críticas irreverentes que ya
ventiló en otros trabajos como El hambre en el mundo,Los nuevos amos del
mundo y aquellos que se le resisten, El imperio de la
vergüenza o El odio a Occidente. “Hay que multiplicar
rápidamente las fisuras en el muro capitalista para derrumbarlo y crear un
nuevo orden mundial más justo”.
Su
receta para revertir esta situación es, si cabe, tan radical o más que su tesis sobre
la generación de las desigualdades: “Ocupar masivamente los bancos, nacionalizarlos y confiscar las
arrogantes riquezas robadas por los especuladores financieros”. Una
extremista postura que lo lleva incluso a criticar la incapacidad de
movimientos de la sociedad civil como el 15M en España u Occupy Wall Street en Estados Unidos.
“Reconozco que son símbolos importantes y que han logrado la simpatía de la
sociedad, pero todavía son insuficientes para quebrar la actual relación de
fuerzas si no desembocan en una huelga general. Hay que darse cuenta de que en el orden
mundial reina una violencia estructural que se debe combatir con una
contraviolencia basada en la resistencia pacífica”.
La migración de los grandes fondos especulativos a los mercados de materias
primas, principalmente de la
agroalimentación, la cual creció exponencialmente en el trienio 2005-2008 como
explica Ziegler en su último libro, “es
el origen de esta crisis genocida porque han disparado el precio de los
alimentos básicos”. A pesar de la ‘destrucción masiva’ conceptualizada por
Ziegler, el diplomático exhibe su característico optimismo de luchador a
contracorriente y asegura que esta situación creará la conciencia social necesaria para
“multiplicar rápidamente las fisuras en el muro capitalista, que acabarán
derrumbándolo y creando un nuevo orden mundial”.
La
insurrección será por el hambre o no será.
El
primer paso, explica, es darse cuenta de que “los criminales financieros son el
enemigo común de los europeos, de los africanos y del resto de la población que
sufre de hambre y desempleo en el mundo. Unos oligarcas que monopolizan
los beneficios y privatizan los servicios y recursos”. Para Ziegler,
esta toma de conciencia será el advenimiento de una nueva forma de
solidaridad internacional entre todos los pueblos, que posteriormente se
transformará en un “frente de resistencia intercontinental”. La lucha
de clases es absolutamente inevitable porque no se puede mantener el sufrimiento
de forma permanente”.
Un
convencimiento “total”, pero que se transforma en duda cuando se le pregunta
por los riesgos y los pilares sobre los que se fundará este alzamiento
popular. “Es un misterio, no puedo hablar de la revolución porque se
trata de la libertad liberada en las personas y los procesos revolucionarios
son imposibles de prevenir porque tienen sus propias leyes y no son conocidas”.
Lo
que sí tiene claro Ziegler es que la insurrección, como ha ocurrido en la mayoría de estos
procesos a lo largo de la historia, se producirá por el hambre. “La hambruna ya es una realidad en
las banlieues parisinas y el pueblo español
también está sufriendo la pobreza, como el resto de Europa”. En este
contexto, indica, la lucha de clases es “absolutamente inevitable porque las
oligarquías capitalistas no serán capaces de reeditar el genocidio americano de
los indios, ya que es imposible matar a todo un país como España y hacerle
aceptar permanentemente las cadenas”.
“España
no debería pagar su deuda porque es delictiva e ilegítima”.
Las
“cadenas” a las que retóricamente se refiere este diplomático de la
ONU estarían impuestas por las políticas económicas de la austeridad,
que califica como “absurdas y destructoras”. Los teóricos del neoliberalismo, añade, “nos
han hecho creer que hoy en día la austeridad es la única política posible, pero
sólo se aplica a la clase trabajadora y nunca a los banqueros. Estas políticas tienen un límite objetivo y
no van a resolver los problemas”. Hollande y Obama deben formar
una alianza en favor de las políticas económicas del crecimiento”.
En
contraposición a estas recetas neoliberales, Ziegler defiende unas políticas centradas en el crecimiento. Esta
es la única esperanza que deposita en los representantes políticos, aunque
matiza que de forma “extremadamente leve”. Sus protagonistas no podrían ser
otros que François Hollande y Barack Obama. “Ambos deben
formar una alianza por el crecimiento basada en la inversión pública, el
incremento del salario mínimo, las prestaciones sociales, la búsqueda del pleno
empleo y la lucha contra la desindustrialización”.
Para
el vicepresidente del consejo consultivo de Derechos Humanos de la
ONU estas políticas no son la solución final si no van acompañadas
de un despertar de la sociedad civil y, sobre todo, del impago de la deuda.
“Los
dirigentes españoles deben hacer lo mismo que ha hecho Rafael Correa en Ecuador, es decir, negarse
a pagar la deuda, cuya amortización ya es altísima, porque es odiosa e
ilegítima. Esto es, se ha creado, en gran parte, por la delincuencia financiera
y la corrupción política, sin materializarse en inversiones reales”.
Unai. Uno de mis cinco nietos, para los cuales deseo y procuro un mundo, y nuestro país, humanista y libertario; como para el resto de los 'nietos' de la Tierra GAIA. |
Una
perspectiva que lo lleva incluso a cometer el atrevimiento de recomendar a los
españoles que objeten en la declaración de la renta al porcentaje del
gasto dedicado a la deuda pública. Una campaña lanzada desde el 15M
que califica de “necesaria, inteligente y eficaz”. Todos estos elementos en su
conjunto, unidos a la inflación, podrán acabar con las “deudas injustas”.
Refundar la
ONU para instaurar un nuevo orden mundial.
La Organización de las
Naciones Unidas debe tener un papel central en el futuro escenario mundial. Como explica Ziegler, la ONU se fundó
con el objetivo principal de defender el interés general de los pueblos y
promulgar los principios recogidos en la Carta de los Derechos
Humanos. Sin embargo, “los mercenarios han pervertido su papel y destruido su
credibilidad moral”. Entre ellos, no duda en señalar al exsecretario
general Ban Ki-Moon o al presidente del consejo de selección de los
relatores, el hondureño Roberto Flores, “quien apoyó el golpe de
Estado en su país en 2009”. Los mercenarios han pervertido el papel
de la ONU y destruido su credibilidad moral.
Para
Ziegler, la refundación de esta
organización pasa por imprimirle “mucha más democracia” eliminando el poder
de veto de las naciones integrantes del Consejo de Seguridad, limpiándola de
“golpistas” y eliminando las prebendas del FMI y el BM. El
neoliberalismo delictivo, concluye el diplomático, debe acabarse ya.
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Posted by armak1358 Saturday,
February 18, 2012 ·
Los
Gansters de la bolsa destruyen el planeta
UN SAQUEO MUNDIAL:
Entrevista a Jean Ziegler, ex Relator Especial
para el Derecho a la Alimentación del Consejo de los Derechos Humanos de las
Naciones Unidas
“Los
niños están muriendo por culpa de los gánsters de la Bolsa”
En sus libros, que marcan opinión, Jean Ziegler no deja de
denunciar el carácter absurdo y criminal de las políticas del capitalismo hacia
los pueblos del Tercer Mundo. Fue el Relator Especial para el Derecho a la
Alimentación del Consejo de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas desde
el año 2000 a 2008. Michel Collon le ha preguntado en Ginebra sobre la crisis,
la Bolsa, el hambre, Obama, Israel…
¿Te ha sorprendido la crisis?
En su violencia sí. No pensé que los mafiosos de las finanzas
arruinarían la economía mundial a tanta velocidad:
Se han destruido 1,8 billones de dólares de valores
patrimoniales. Para los países del Tercer Mundo es una catástrofe absoluta.
Pero también para los países industrializados.
¿Siguen siendo los pobres los que pagan?
Sí. El 22 de octubre de 2008 los quince países del euro se
reunieron en París. En la escalinata del Elíseo Merkel y Sarkozy dijeron:
«Hemos liberado 1,5 billones de euros para el crédito y para
subir el techo de autofinanciación del 3 al 5%».
En el mismo año los mismos países europeos redujeron sus
subvenciones para el Programa Mundial de Alimentos (que sólo se mantiene con
esas subvenciones) un 40%. De 6.000 millones de dólares a menos de 4.000.
Eso ha originado que Bangladesh haya suprimido las comidas
escolares. Un millón de niños están grave y permanentemente desnutridos. Por lo
tanto esos niños mueren por culpa de los gánsteres de la Bolsa. Son muertes
reales. Los especuladores, hoy, deberían ser juzgados por el Tribunal de
Nuremberg.
¿Qué lección han aprendido de la crisis los poderosos?
Ninguna. Miremos, por ejemplo, a Suiza. El contribuyente suizo
pagó 61.000 millones de dólares por el rescate del banco más grande, el UBS. El
año pasado, 2009, los dirigentes del UBS, siempre al borde de la bancarrota, se
repartieron entre ellos bonus por ¡Cuatro mil millones de
francos suizos!
El saqueo es total y la impotencia de los Gobiernos, que se
comportan como mercenarios, también es total.
En todos los casos, en Suiza, en Francia, en Alemania, de donde
tengo algunas informaciones. Es un escándalo permanente.
Obviamente, la careta neoliberal ha caído con su pretendida
legitimidad. Pero el cinismo y la arrogancia de los banqueros triunfan totalmente.
No, si miras las cifras son catastróficas. Cada cinco segundos
un niño muere de hambre.
47.000 personas mueren de hambre todos los días.
Mil millones de personas (es decir una persona de cada seis)
están grave y permanentemente desnutridas.
¡Mientras que la agricultura mundial en su estado de desarrollo
actual podría alimentar sin problemas a doce mil millones de seres humanos con
2.700 calorías por individuo diarias! Así pues, en este principio del siglo no
se trata de ninguna fatalidad. La muerte de un niño por hambre mientras estamos
hablando es un asesinato. Es catastrófico.
El orden mundial del capital financiero globalizado es letal
–epidemias, muertes por contaminación del agua, etc.- y al mismo tiempo es
absurdo, mata sin necesidad.
Es el orden de las oligarquías y del capital financiero
globalizado. En el plano de la lucha contra el hambre el fracaso es absoluto.
Hace falta una ruptura radical con este mundo caníbal.
Mientras que no se resuelve el problema del hambre, cada vez se
gasta más para hacer la guerra.
En 2005, por primera vez, los gastos mundiales de armamento (no
los presupuestos militares, sino exactamente los gastos en armamento)
sobrepasaron el billón de dólares anual. Vivimos en un mundo totalmente
absurdo.
Estados Unidos sigue siendo la mayor potencia industrial del
mundo:
produce el 25% de las mercancías industriales y la materia prima
es el petróleo; necesita 20 millones de barriles diarios de los cuales importa
el 61%.
Se puede importar de regiones como Oriente Medio o Asia Central,
lo que le obliga a mantener un ejército absolutamente desmesurado y por lo
tanto el presupuesto federal está totalmente parasitado por los créditos
militares… Pero ésa es la lógica del imperio.
¿Qué piensas de lo que pasa actualmente en Israel y cómo puede
evolucionar eso?
Creo que Tel Aviv dicta la política exterior de Estados Unidos,
con el lobby del AIPAC como poder determinante.
Incluso antes que los políticos, en primer lugar fueron las
multinacionales petroleras las que decidieron armar a Israel.
El Estado de Israel –no lo digo yo, sino el Relator Especial de
los Territorios Ocupados- lleva a cabo una política permanente de terrorismo de
Estado.
¿Qué podemos hacer nosotros, los europeos, para despertarla?
Desde junio de 2002 existe un acuerdo de libre comercio entre
Israel y los 27 países de la Unión Europea que absorbe el 62% de las
exportaciones israelíes.
En ese acuerdo, el artículo 2 (es el mismo en todos los tratados
de libre comercio) dice: la condición para que el acuerdo sea válido es que las
partes contratantes respeten los derechos humanos.
Pero las violencias que infligen los israelíes a los palestinos
–robo de la tierra, tortura permanente, ejecuciones extrajudiciales,
asesinatos, el castigo colectivo de la desnutrición organizada- son violaciones
permanentes de los derechos humanos más elementales. Si la Comisión Europea
suspendiera durante 15 días el acuerdo de libre comercio los generales
israelíes entrarían en razón inmediatamente.
Hay que forzar a nuestros Gobiernos. No somos impotentes. En
Bélgica hay muchos problemas, en Suiza y en Francia también. Pero una cosa es
cierta: las libertades públicas existen.
Hay que aprovechar esas libertades públicas para imponer a
nuestros gobernantes un cambio radical de política, eso es todo. Si no lo
hacen, entonces no hay que votar por ellos, ¡así de simple!
Pero todos esos Gobiernos están de acuerdo en apoyar a Israel.
En Francia, por ejemplo, tanto el UMP como el PS apoyan a Israel.
Apoyar la seguridad y la permanencia de Israel es una cosa. Pero
esta complicidad con el terrorismo de Estado y la política de colonización no
es posible. Es la negación de nuestros valores, eso es «el fascismo exterior».
Es decir, que tenemos valores democráticos dentro de nuestras fronteras y en el
exterior somos aliados del fascismo.
Y finalmente, ¿cuál es el papel de los medios de comunicación en
todo esto?
Están totalmente sometidos. Especialmente en períodos de crisis
los periodistas temen por sus empleos.
La agresividad del lobby israelí es terrible. Yo sufrí la
calumnia más tremenda, y eso continúa en las Naciones Unidas por otra parte.
Sobreviví gracias a Kofi Annan.
Israel es un peligro para la paz mundial, Israel causa
sufrimientos terribles. Y en ese país a los opositores como Warschawski se les
margina completamente. Pero si la oposición israelí anticolonialista y
antiimperialista no tiene la palabra, no tiene influencia, entonces vamos hacia
el abismo. Hay que apoyar a los opositores.
¿Y el papel de los medios de comunicación con respecto a la
crisis?
Nos presentan la crisis como una fatalidad, una catástrofe
natural, ¡pero los responsables tienen nombres y apellidos!
American
Israel Public Affairs Committee
De Wikipedia, la enciclopedia libre
El American Israel Public Affairs Committee (Comité
de Asuntos Públicos Estados Unidos-Israel, cuya sigla es AIPAC) es
un lobby estadounidense que realiza tareas en el Congreso de los Estados Unidos y en
la Casa Blanca en favor de mantener una estrecha
relación entre Israel y Estados Unidos.
Se describe a sí misma como un “Lobby Pro-Israel en
EE. UU.”. Es una organización sin fines de lucro, con gran cantidad de miembros
incluyendo Demócratas, Republicanos e independientes. AIPAC es
financiado por las contribuciones de sus miembros.
AIPAC se formó durante la administración de Dwight D. Eisenhower y desde entonces ha
ayudado a asegurar la ayuda y el apoyo de EE. UU. a Israel. En 1997, la
revista Fortune pidió a los congresistas que
elijan las “25 más poderosas” organizaciones de lobby en DC. En 2005, el Diario Nacional hizo lo mismo.
Ambas veces, AIPAC quedó en 2º lugar -por delante de, por
ejemplo, la American Federation of Labor and Congress of Industrial
Organizations (AFL-CIO) y la National Rifle Association (ANR),
pero detrás de la American Association of Retired Persons (AARP)[1] En 2001,
quedó en el 4º lugar de la lista de Fortune.[2]
AIPAC tiene fuertes enlaces con la usina
de ideas del Washington Institute for Near East Policy.[3]
El Aipac, institución judía de
peso, tiene mucho que ver en RREE de EEUUA-
MÁS PODEROSO QUE
LOS SINDICATOS, TIENE 100.000 MIEMBROS Y OFICINAS EN TODO EL PAÍS
El lobby que
corta el bacalao.
El Aipac, institución judía de peso, tiene mucho que ver en la
política exterior de EEUU
B. SMIALOWSKI AFP
Hillary. La ex
primera dama, es una de las tantas figuras que pasó por el Aipac
POR PEDRO DUTOUR DE LA REDACCIÓN DE EL OBSERVADOR
Hay un grupo de presión en Estados Unidos que, tanto como la
propia potencia, marca la agenda en asuntos exteriores. Es el poderoso American
Israel Public Affairs Committee (Aipac), una institución con llegada directa al
Congreso y a la Casa Blanca y que se define a sí misma como un lobby
proisraelí.
La sede central en Washington es mojón obligatorio para los más
ilustres personajes del mundo económico y político del país. Ayer, por ejemplo,
recibió a la secretaria de Estado, Hillary Clinton, en medio de la peor crisis
diplomática entre Estados Unidos e Israel en 35 años (ver apunte). En Estados
Unidos viven 5,3 millones de judíos, casi tanto como los que habitan en Israel
(de 7,5 millones de habitantes, con 20% de población árabe), lo que ha
generado, desde la misma creación del Estado hebreo en 1948, una vinculación
muy estrecha entre las dos naciones. El Aipac vela para que así sea y que no
decaiga el apoyo de Washington a Israel, pese a las horas bajas que están
viviendo sus relaciones ante la actual situación del proceso de paz en Medio
Oriente.
Considerado junto al Conference of Presidents of Major American
Jewish Organizations (Conferencia de Presidentes de las Organizaciones Judías
de Estados Unidos) como el lobby judío más influyente, es a su vez señalado por
muchos miembros del Congreso como un organismo más poderoso que la Asociación
Nacional del Rifle o la Federación Estadounidense del Trabajo o el Congreso de
Organizaciones Industriales, tres pesos pesados de la realidad estadounidense.
El diario The New York Times, en cita publicada en la página web del Aipac, afirma
que se trata de “la más importante organización vinculada a las relaciones
entre Estados Unidos e Israel”.
El Aipac, que nació durante el gobierno de Dwight D. Eisenhower
(1953-1961), es una organización sin fines de lucro que maneja un presupuesto anual
de hasta US$ 60 millones, financiado por los 100 mil miembros con los que
cuenta en la actualidad. Entre los participantes hay demócratas, republicanos,
independientes, judíos y no judíos.
Con más de 150 empleados, el Aipac realiza un trabajo fino con
los senadores y representantes, con un lobby permanente y eficaz. La
organización publica informes regularmente y mantiene oficinas en todo el país.
El portal en internet es un instrumento valiosísimo para su causa y la
utilización del correo electrónico es una herramienta de primer orden.
Así como Hillary Clinton habló ayer en el Congreso anual del
Aipac –que tiene como invitado también al primer ministro israelí Benjamin
Netanyahu, que ya se encuentra en Estados Unidos–, el presidente Barack Obama,
el ex candidato presidencial republicano John McCain, congresistas varios,
antiguos mandatarios como George W. Bush y Bill Clinton han pasado por la
institución y han explicado sus políticas hacia Israel y Medio Oriente. En
pocas palabras: enfrentarse al Aipac puede tener un costo político grave.
Conflictos y objetivos. Los críticos del Aipac consideran que
esta institución siempre ha sido más belicista respecto al conflicto de Medio
Oriente que la mayoría de los judíos estadounidenses y que los propios gobiernos
israelíes. De hecho, abandonó su postura contraria a la creación de un estado
palestino –sin apoyar abiertamente esta idea– cuando Ehud Barak, del
centroizquierdista Partido Laborista, se convirtió en primer ministro de Israel
en 1999. En 2005, el FBI abrió una investigación a la institución debido a que,
supuestamente, algunos de sus trabajadores transfirieron documentos
clasificados a Israel, según el diario online israelí Ynet.
A lo largo de la historia, el Aipac ha seguido puntillosamente
el conflicto en Medio Oriente, enarbolando la bandera de Israel. Hoy en día, el
objetivo es mantener el pulso a Irán –cuyo gobierno maltrata abiertamente a
Israel– y que Estados Unidos promulgue sanciones contra Teherán por su programa
nuclear, sobre el que Occidente cree que mantiene fines bélicos. El Aipac ha
logrado pasar al Congreso, en los últimos 15 años, docenas de leyes y
resoluciones condenando a Irán y pidiendo sanciones más duras sobre el régimen
de los ayatolás.
La organización también cuida a Israel del vecindario: que
Estados Unidos no se pase en ayuda militar a los países árabes aliados de
Washington y, claro está, se asegura que esa ayuda militar arribe a Israel sin
impedimentos “para que sea capaz de enfrentar las crecientes amenazas”, como
asegura la página web del Aipac. Israel recibe de Estados Unidos unos US$ 3.000
millones en asistencia militar. El Aipac se encarga de que así sea.
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APUNTE. AFP.-
Hillary Clinton pide decisiones “difíciles”
La secretaria de Estado, Hillary Clinton, urgió ayer a Israel a tomar “decisiones difíciles pero necesarias” para
la paz con los árabes, al tiempo que prometió su compromiso “sólido” con la
seguridad israelí. En el discurso dirigido al Aipac, Clinton dijo que EEUU no
cederá en su “compromiso” de impedir que uno de los mayores enemigos de Israel,
Irán, se dote de la bomba atómica.
Las declaraciones de Clinton tienen lugar en medio de uno de los
períodos más difíciles de las relaciones entre EEUU e Israel, cuando la
administración de Barack Obama lucha por reanimar las conversaciones de paz en
Medio Oriente ante la incesante expansión de los asentamientos israelíes en los
territorios palestinos. “Las nuevas construcciones en Jerusalén Este o
Cisjordania socavan la confianza mutua y amenazan las conversaciones cercanas
que son el primer paso hacia las negociaciones completas que ambas partes
desean y necesitan”, indicó Clinton.
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Saludos Tar.
ResponderEliminarMarx llegó a la conclusión de que la naturaleza de los individuos y de las sociedades dependerá en última instancia de las condiciones materiales de la producción que determinarán la estructura social y las formas de propiedad,tal y como se puede leer en los "Manuscritos económicos y filosóficos"- materialismo histórico.
Pudiera ser que el exceso de confianza de los señores del sistema en su entramado económico desvocara en alguna revolución, ojalá así sea, pero teniendo en cuenta que alrededor de una cuarta parte de la suciedad occidental está bajo nómina del neoliberalismo y otro gran porcentaje está bajo el influjo imnotizador de estos brujos oligárquicos, resulta difícil creer que algún levantamiento popular los desvanque; en cuyo caso, yo apostaría por un sistema cooperativista.
Un abrazo.