prosigue la reflexión:
El 24/06/08, "Thomas" escribió:
Estamos equivocados sobre el nacionalismo, desde luego el futuro no va por el internacionalismo y si va lo hace muy lentamente, desde Berlín me he dado cuenta de mi idealismo desmesurado, todo dios es nacionalista! menos algunos vascos! que asco!
Ya continuare cuando este en mi PC este no me manda los mes bien.
De: Mikel Orrantia Diez
Fecha: Wed, 25 Jun 2008
Asunto: [askatasuna.libertad.orrantia] "curarse de nacionalismo"
Pásalo bien, Tomás, en lo que supongo buenas vacaciones europeas.
En cuanto a mí: me importa un huevo por donde va el futuro si no me gusta ni la senda, ni la ermita, ni la romería, ni la música, ni los acompañantes de la llegada... Ni el nacionalismo, ni dios, ni el poder de dominio, ni su expresión temporal territorial el Estado nación, ni los políticos e intelectuales oportunistas y buscavidas y dogmáticos de encargo, son para mí un camino atractivo... Y si fuese el único ¡me jodería, por supuesto, y trataría de sobrevivir! ¡ya tome las armas, literalmente, contra la Dictadura franquista, y fui monaguillo y campanero en el nacionalcatolicismo, y represaliado por el leninismo orgánico en la militancia clandestina! ¡¡Joder!! ¡¡Ya hice la mili…!! por lo tanto, ya cumplí para lo que dé de sí mi vida; cumplí y pague, un alto precio: dos décadas de militancia activa y entregada, para bien y para mal, a las que no solo no renuncio, sino que las reivindico como propias de mi experiencia vital, sobre todo ese exilio en Bruxelles que tanto contribuyo a desasnarme y darme una oportunidad cultural difícil de adquirir en otro contexto…: ese de entonces y este de hoy (y desde entonces acá), ese, soy yo, hoy en día. Superviviente, felizmente, desde la derrota a un cierto bienestar ganado a pulso y sin avasallar nunca a nadie, que haya sido yo consciente.
Así, tal y como, mas o menos, he venido haciendo desde 1981 u 82: sobrevivir lo mejor que se pueda sin joder a nadie, y lo más honradamente que he podido: responsable, respetuoso, convivial y buscador, como en la ‘quimera del oro’, de un modelo socialista y libertario para mi pueblo (el vasco y el europeo, y el español…) y para la Humanidad... tratando de ser yo mismo al tiempo. Y, logrando un cierto éxito personal en el intento, por cierto. En éste sistema capitalista liberal y global (quizá, dos mentiras como dos soles ambas) de los cojones y el oprobio, con unos gramos de inteligencia y otros de voluntad y un poco de estomago (que también), se puede sobrevivir individualmente (y con los tuyos) en condiciones nada desdeñables... ¡que te voy a decir!
Hablaremos, si nos apetece; pues la larga noche del capitalismo que nos toca sufrir (más intelectualmente que en nuestro bienestar, hay que decirlo) va para largo, y no parece que la Oposición al mismo se vaya a significar mañana mismo lo suficiente como cuestionar un mínimo su hegemonía, por desgracia.... Si tengo que ser manipulado, que lo sea al menos con jamón y buen vino y amigos al rededor que lo disfruten; el resto, amigo, es una milonga dolorosa y cantante que no sirve mas que para añadir dolor al sufrimiento y manipulación a la manipulación.
Si hay que pelear, por mi parte, en lo que me concierne, y ya lo he dicho antes, que sea por aquello que merece la pena: un socialismo humanista y democrático y libertario, que reconozca el derecho individual y el de las colectividades a vivir libres y autorepresentadas… Mas en corto:, por una Europa unida en una sola Nación Estado confederal que supere y deje atrás los nacionalismos imperiales de los viejos estados nación como España y Francia… Y, por una Euskal Herria en paz y cohesionada que deje en el desván del olvido los años de una ETA que no supo y no quiso escuchar a su propio pueblo y practico el terrorismo político contra el camuflado de lucha armada de liberación nacional y social. Desde luego, en modo alguno, no me moveré un pelo de mi vida (¿¡torre de marfil?!) por una plataforma de KAS o un Estatuto o un incremento salarial, o una transferencia… que se pueden lograr negociando y en paz y con tiempo: ¡a mi no me pilla ese esfuerzo y sacrificio inútil, del que siempre se aprovechan unos cuantos, pocos, a costa de unos cuantos o muchos! Opino y afirmo.
Se feliz. Agur.
Mikel
ESTAMOS BIEN JODIDOS, DESCONTENTOS, PERO VIVIMOS BIEN Y SOMOS BIEN FELICES... O, ASÍ ES LA VIDA QUE NOS TOCA VIVIR...
ResponderEliminarMikel
Salud, amigo Tomás.
No se trata de polemizar, decir por decir, no al menos por mí parte. Te aprecio y te respeto como eres, ningún deseo de cambiarte, ni a ti ni a nadie; hace muchísimos años que deje detrás en mí vida el deseo de cambiar a las gentes para lograr un mundo mejor que, lógicamente, identificaba con el de mí visión del mundo futuro ideal... No condiciona mí relación contigo, mí amistad, ni tu homosexualidad ni tu amor por el euskera y la cultura y pueblo vascos. Simplemente soy distinto a ti; en unas cosas, y similar en algunas otras... En modo alguno creo que nos vaya a salvar el euskera o la homosexualidad... De hecho, no creo en salvación ninguna. Creo en una vida digna entre personas dignas y por lo tanto libres, iguales y solidarias, ese es mí sueño o visión, el o la que perdura y me llevare a la tumba, tan campante. Pero di deseo aprovechar esta nuestra relación epistolar que nos facilita la nueva modernidad tecnológica cibernética, Internet, vamos, para apuntarte un par de reflexiones: a) soy vasco castellano parlante, el español es mí idioma de vasco, al que no solo no renuncio, pero al que aprecio y conozco y estudio para comunicarme lo mejor que pueda con mis entornos; sin añoranzas ya (desde hace muchísimos años, también ¡que viejo me hago, coño!) de ‘recuperación’ de un idioma que nunca fue de mis padres, ni abuelos, por no remontarme más; algunos vascos bajo presión y oportunidad dejaron de hablarlo y adoptaron otro, el que a mí y a mí generación nos llego como legado cultural y con el cual vivimos nuestras vidas... No debéis olvidarlo jamás los vascos euskaldunes... Si lo hacéis y nos forzáis la moderéis bien jodida... Para el euskera y para los vascos. No hay Euskal Herria sin euskera: es mas que probable; pero no hay Euskal Herria sin castellano y francés respetados como vascos romances, nuevas lenguas francas de los vascos de hoy (y de antes de ayer, por decirlo). En cuanto al sexo: carezco de animo, ni tengo atracción ninguna por el sexo homosexual. Soy así. Mis respetos por otras formas de vida sexual distintas a la mía... Pero, no necesito poner el sexo por delante de nada; y, no creo que él solo explique el porque de la opresión de la humanidad ni de los vascos. Entiendo que aquellos homosexuales, que habéis jodido buenos años de vuestra vida ocultando vuestra sexualidad por temor debido a la represión imperante, estéis encabronados por ello... Pero, hazte una idea: a otros, los como yo heterosexuales, nos toco así mismo ocultar la nuestra por la farisea y nacionalcatolica opresión cultural dominante: ¡todos los amantes de la libertad del libre comportamiento, de la cultura y de las gentes de bien... Jodidos y bien jodidos! A ti por homosexual, reprimido como tal en tu identidad, a mí como heterosexual, reprimido como tal en mí identidad; a ambos nos atormentaron la adolescencia y la infancia y la juventud primera con temores míticos sin sentido, amenazando nuestras pobres vidas con terrores sin fin si caíamos en el pecado de relacionarnos libremente entre nosotros según nuestras libres apetencias sexuales, entre otras.
Disentir no es desafecto, es libertad. Y bien expresado, el disenso facilita la reflexión matizada, el aprendizaje de la diferencia y del respeto al otro. Yo aprendo de ti, tu aprendes de mí. Tu y yo, amigo Tomás, parecemos llamados a disentir entre afecto y respeto mutuo. Sea pues así, si te parece.
Te saludo con afecto.
Mikel –Tar
(me disculpo por utilizar tus siempre incitantes y excitantes homilías en mí Blog; suscitan en mí reflexiones u homilías, que entiendo pueden ser de alguna utilidad a lectores terceros, sin más)
El 12/07/08. "Thomas" escribió:
No quiero polemizar, sólo que todo el mundo es mas nacionalista de lo que entreveía y luego eso de que... hay vencedores y vencidos. Si los hay, siempre los hubo. Uno se puede salir del bando de los vencidos, pero no se salen los vencedores de su bando, sólo los que fueron vencidos. Yo reconozco la derrota en toda regla de mis ideas aunque las haya mandado al carajo. De mis ideas y de mis vivencias conviviales expresadas en euskara, en esa lengua a la que ayude y me ayude en ella, protegí y me protegió, hoy sólo es una quimera vencida, sin hablantes, sólo con sonidos pardos, con guturalidades inexpresivas, con disertaciones estúpidas, con comunicaciones interferidas, heridas dolientes en aquella magnificiencia digna de hombres y mujeres naturales que labró durante milenios un código sutil, bello por su rareza, sabio por su antiquísima experiencia y mortal de necesidad ante las fauces devoradoras del mundo de la depredación global neoliberal. Hemos sido vencidos los vascos universales, que siendo vascos de lengua pretendíamos alzarnos a lo universal a través del código que nos unía como comunidad diferenciada. Fue la cuita de la nobleza, eso que nos impulsa a proteger lo debil, a levantar lo caído y a cobijarse con ellos en la tempestad. Ahora podrán clamar a los cielos de cartón los Savaters, los Aznar y los Zapateros de naciones y valores pretéritos que recuerdan al honor, la ortodoxia y la patria de los siglos pasados. Ellos también serán aniquilados por el tiempo, como el euskara de los vascos y el occitano de los cuácaros. Y un día, si el tiempo lo permite y la Madre Tierra no nos mata antes, el ser humano entendera al final, el lenguaje universal e igualitario de la vida. El mundo recordará a los cuácaros, a los euskaros, a las brujas y a Vercingetorix y el vencedor seguirá riéndose de ellos como siempre. Aprovecho para mandarte algo que es al menos novedad en tu contexto intelectual, aunque no tenga nada que ver con lo precedente, va añadido.
Thomas